Ingresos fijos
Esta es quizás el tipo más tradicional de alquiler. Como propietario, recibirás una cantidad fija antes de cada temporada, de manera que es prácticamente como si tuvieras un alquiler convencional, pero con todas las comodidades que incluimos en nuestros servicios de gestión y de mantenimiento necesarios para la conservación de tu vivienda en las mejores condiciones.
Disponemos de un equipo de profesionales preparados para solucionar cualquier tipo de incidencia que pudiera producirse en la vivienda, de manera que si, por ejemplo, se estropea un electrodoméstico o no funciona un enchufe, nosotros realizamos las gestiones pertinentes para que puedas estar tranquilo.
Ingresos variables
En este tipo de tarifa, los ingresos que se obtengan a final de temporada son variables, por ello también nuestras tarifas. A final de mes y una vez hayas recibido tu renta por alquiler, descontamos nuestro porcentaje relativo a la gestión que irá en función de lo que hayas obtenido. Nosotros nos adaptamos a tus preferencias, ofreciendo un soporte personalizado a nuestros clientes y a los huéspedes, resolviendo cualquier tipo de duda que tengas y solucionando cualquier problema que surja en la propiedad.
Sabemos de lo que supone estar pendiente como propietario de todo lo que sucede en tu vivienda, y del mantenimiento que llevan las propiedades. Es por esta razón que hemos querido ofrecer servicios de alquiler vacacional de forma conjunta, sin que tengas que acudir a otro profesional para el mantenimiento, limpieza y la entrada y salida de huéspedes. ¡Tu propiedad estará en buenas manos!